El régimen de Correa dejó una enorme cuenta por pagar. Mientras de un lado se halagaba a la gente con bonos, becas, empleos burocráticos, feriados, gratuidad y subsidios, en las altas esferas de las jerarquías correístas no descansaban en organizar el saqueo y los negociados.
Esa cuenta hay que pagarla. Correa y sus cómplices se sostuvieron del crédito chino, de las preventas petroleras, de las inversiones de las compañías chinas y de Odebrecht, de los préstamos, de la venta del oro, del asalto al seguro social, de los fondos de cesantía de la UNE, de las utilidades de los trabajadores, y un largo y todavía no sacado a luz “etcétera”. Eso se acabó, nos llega la resaca del carnaval del caudillo.
Dejó a cargo al ex- mirista (MIR) Lenin Moreno. Yo admiraba al MIR chileno -en esos lejanos tiempos- a su líder Miguel Enríquez, abatido en un asalto de la DINA.
El MIR ecuatoriano era solo un grupo reducido. No fue mi elección. Pero Lenín Moreno ganó en sensatez, en razones, en meditar otra cosa. Hasta llegó a mencionar a Freud y su pulsión de muerte. Ave rara.
Ahora tenemos el paro del transporte público para rechazar la eliminación de los subsidios a la gasolina. Arden en santa furia las jerarquías del transporte, decretan un paro y se suma con todo entusiasmo la llamada RC (Revolución Ciudadana… Rafael Correa ??). Si de un lado este pueblo, tantas veces invocado, encarna
el alma bella que ignora su participación en los males que denuncia, a lado, hipócritas y falsarios, están los canallas organizados, los culpables mayores, los despilfarradores de ayer que hoy, descarados, se declaran inocentes perjudicados.
ZADIG (Zero Abjection Democratic International Group ) es el espacio en el psicoanálisis para conversar lo que estamos pasando, que viene también del ayer, y de los propósitos buscados. No jugamos a marchas y motines, esos carnavales violentos.