El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez y el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, anunciaron este martes un acuerdo para desbloquear la formación de Gobierno basado en la lealtad y para cuatro años y han pedido generosidad al resto de las fuerzas políticas para poder sumar los apoyos necesarios para la investidura.
Sánchez e Iglesias firmaron en el Parlamento un documento con las bases de este acuerdo, que desarrollarán en las próximas semanas en las que también se decidirá la estructura del gobierno y su composición. Sobre esta última cuestión, Sánchez dijo que hay “voluntad de aprovechar los perfiles más idóneos para las tareas de gobierno”.
En solo 48 horas, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias han firmado el acuerdo de coalición que no pudieron acordar hace seis meseshttps://t.co/HzAtgHpCSc pic.twitter.com/w0ww9XJRTG
— EL PAÍS (@el_pais) November 12, 2019
Al finalizar el acto, y después de seis meses de enfrentamientos durísimos, los dos líderes se dieron un simbólico abrazo y la sala, llena de cargos de ambos partidos y de periodistas, explotó en un “oooooooh” casi burlón. según la reseña de diario El País.
Sánchez se había negado durante meses a aceptar que miembros de Podemos y en especial Iglesias pudieran estar en su Gobierno. Durante la campaña electoral lo repitió muchas veces. Pero los dos partidos perdieron votos en las elecciones y eso les ha vuelto a todos más flexibles porque en una nueva repetición Sánchez correría el riesgo de perder el Gobierno.
El fiasco de la repetición electoral, que se habría evitado si este acuerdo se hubiese alcanzado en verano, ha hecho la negociación súbitamente muy sencilla. “Es tiempo de dejar atrás cualquier reproche”, dijo Iglesias. “Los españoles han hablado y nos corresponde superar el bloqueo. No pudimos lograr este acuerdo (en julio), aunque estuvimos muy cerca. Somos conscientes de la decepción que eso supuso entre los progresistas”, dijo Sánchez.
Los contactos entre los líderes de PSOE y Unidas Podemos comenzaron en la noche del pasado lunes con la máxima discreción. Después tomaron las riendas de la negociación las respectivas números dos, la socialista Adriana Lastra y la dirigente de Unidas Podemos Irene Montero.
La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, reprochó al jefe del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, que ha debido someter a la sociedad al coste económico de unas nuevas elecciones para finalmente abrirse a pactar con el líder de Podemos, Pablo Iglesias.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del ejecutivo catalán, Budó arremetió contra la “prepotencia e incapacidad” de Pedro Sánchez para llegar a pactos en la anterior legislatura, lo que llevó a una repetición electoral, con su correspondiente coste económico, que “no ha cambiado demasiado el escenario.
“A los españoles les preocupa mucho el acuerdo que acaban de anunciar”, dijo Pablo Casado. El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, reclamó al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, que “se piense muy bien” el acuerdo con Podemos que acaba de anunciar y que “vuelva a hablar” con los partidos “no dudosos” de defender la unidad de España, el Estado Autonómico y una economía que financie los servicios públicos.