El huracán Dorian se debilitó a categoría 1 en la madrugada de este viernes, luego de desatar varios tornados en el sureste estadounidense de los que no se reportaron víctimas, pero sigue siendo poderoso, en su lento avance por la costa este de Estados Unidos, tras haber arrasado las islas Bahamas donde dejó al menos 30 muertos y miles de personas sin hogar, reseña El Nuevo Herald.
El Centro Nacional de Huracanes informó que Dorian avanza con vientos de 150 km/h y “se espera un lento debilitamiento en los próximos días”, aunque “debería seguir siendo un poderoso huracán a medida que su centro se desplace cerca o a lo largo de la costa de Carolina del Norte”.
Los residentes de la costa de Carolina del Norte acataron las órdenes de evacuación mientras otros protegieron sus hogares con tablones y se preparaban para enfrentar la tormenta. El estado de Florida salió en gran medida ileso del paso de Dorian. “Tuvimos suerte en Florida -dijo Donald Trump-. Mucha, mucha suerte de hecho”.
Dorian soplaba con intensidad de categoría 5 cuando se instaló durante casi dos días sobre el norte de las Bahamas, donde dejó una destrucción inimaginable.
Un equipo de la Agencia France Press, que sobrevoló el pueblo de Marsh Harbour el jueve, vio escenas de daños catastróficos, cientos de casas destruidas hasta los cimientos, coches volcados, campos enteros de escombros e inundaciones generalizadas. Un equipo de personas que llevaban máscaras y trajes protectores blancos cargaban cadáveres en bolsas verdes sobre la plataforma de un camión.
Comienza operativo de ayuda a damnificados del huracán Dorian en isla Gran Bahama de parte del crucero Symphony of the Seas. Rafy Rivera tiene los detalles: https://t.co/e09GybZHMe pic.twitter.com/PAC1xDstc8
— CNN en Español (@CNNEE) September 6, 2019
⚠️Así avanza la temporada ciclónica en el Atlántico este viernes: Dorian sigue como huracán; Gabrielle se disipó en el Atlántico norte; un disturbio al noreste del Caribe con baja probabilidad de desarrollo; una onda tropical saliendo de RD y dos más de camino a la región. pic.twitter.com/3s5HjdFAr9
— Jean Suriel (@JeanSuriel) September 6, 2019
Algunos residentes, aún aturdidos por la tormenta, habían salido a las calles arrastrando sus maletas con sus posesiones más valiosas. La extensión del daño en Bahamas comenzaba a conocerse el jueves, a medida que los equipos de socorro lograban recorrer el área para rescatar sobrevivientes y llevar ayuda a las víctimas.
El secretario general adjunto para Asuntos Humanitarios de la ONU, Mark Lowcock, dijo después de reunirse con el primer ministro de Bahamas, Hubert Minnis, que se necesitan con urgencia refugios, agua potable, alimentos y medicinas para unas 50,000 personas en la isla Gran Bahama y para entre 15,000 y 20.000 en Gran Ábaco.
Minnis advirtió que los saqueadores serán castigados “con todo el peso de la ley”, y afirmó que se habían desplegado agentes adicionales de las fuerzas de seguridad. La Guardia Costera estadounidense y la Marina Real británica transportaron sobrevivientes y suministros de emergencia a medida que las aguas de las inundaciones retrocedían en las Bahamas.
En Gran Bahama se usaron motos acuáticas y botes para sacar a víctimas de las casas inundadas o destruidas por la tormenta. Helicópteros estadounidenses y británicos llevaban a cabo evacuaciones médicas, evaluaciones aéreas para ayudar a coordinar los esfuerzos de socorro y vuelos de reconocimiento para conocer los daños.
Trump habló por teléfono con Minnis y prometió la asistencia de su país, dijo la Casa Blanca.