El juez Claudio Bonadio cerró la instrucción y envió a juicio oral a Cristina Kirchner, acusada de ser Jefa de una asociación ilícita que se dedicó a la recaudación “de fondos ilegales” -sobornos- y se le atribuyeron 28 hechos de cohecho pasivo, en un caso en que el que hay 172 procesados y 31 imputados colaboradores, según Clarín. Bonadio volvió a pedir el desafuero de la senadora para arrestarla con prisión preventiva.
Tal como había señalado el fiscal Carlos Stornelli en su acusación final y pedido de elevación a juicio, Bonadio señaló que se dio por corroborada la existencia de una “asociación ilícita que desarrolló sus actividades aproximadamente desde principios del año 2003 hasta noviembre del año 2015, y cuya finalidad fue organizar un sistema de recaudación de fondos para recibir dinero ilegal con el fin de enriquecerse ilegalmente y de utilizar parte de esos fondos en la comisión de otros delitos, todo ello aprovechando su posición como funcionarios del Poder Ejecutivo Nacional”.
La asociación ilícita, según el juez, fue comandada por “Néstor y Cristina Kirchner” en su rol de presidentes de Argentina. Y que el dinero era “entregado alternativamente a los titulares del Poder Ejecutivo o sus secretarios privados en Uruguay 1306 (donde vive la Senadora actualmente), en la Residencia Presidencial de Olivos y/o en la Casa de Gobierno; parte de este dinero fue redistribuido o se realizaron pagos para otros funcionarios públicos”.
Según la acusación, la maniobra fue organizada por Julio De Vido (entonces Ministro de Planificación Federal), Roberto Baratta (ex- Subsecretario de Coordinación y Control de Gestión), “quienes desde los cargos que ocupaban se encargaban de que se realizaran los cobros comprometidos”.
Por este motivo, De Vido, Baratta y José López se encuentran procesados en carácter de organizadores de la asociación ilícita y cohecho pasivo, todos ellos con prisión preventiva.
Sobre el rol del exchofer Oscar Centeno, pese a sus reiterados pedidos para ser sobreseído, irá a juicio oral acusado como miembro de la organización delictiva. Tiene otorgada la libertad por ser el primer “arrepentido” en el expediente, y es parte del programa de imputados protegidos.