Europa Press
La OTAN ha expresado este domingo a última hora su preocupación por la crisis política que atraviesa Moldavia y ha llamado a las partes a actuar con contención y resolver la situación mediante el diálogo.
“La OTAN insta a todas las fuerzas políticas del país a actuar con calma y tranquilidad y a resolver sus discrepancias de forma dialogada respetando el imperio de la ley”, ha indicado la portavoz de la Alianza Oana Lungescu en su cuenta de Twitter.
En este sentido, ha indicado que “los líderes democráticamente elegidos de Moldavia deben colaborar para superar la crisis” y ha resaltado que la organización “ofrece su apoyo a Moldavia en las reformas de sus instituciones de defensa y seguridad”.
El Tribunal Constitucional de Moldavia ha cesado temporalmente de sus funciones al presidente Igor Dodon y ha designado como sustituto provisional al ex primer ministro del país Pavel Filip, en medio de una crisis política que ayer conoció un nuevo episodio después de un polémico acuerdo in extremis para un Gobierno de coalición con la exministra de Educación, Maria Sandu, al frente del Ejecutivo.
Este nuevo Gobierno emergía como una insólita combinación del partido proeuropeo ACUM y el Partido de los Socialistas de la República de Moldavia (PSRM), respaldados por Rusia, ambos unidos por un propósito común: la expulsión del Partido Democrático de Moldavia, liderado por Vladimir Plahotniuc –un multimillonario al que Sandu acusa de corrupción– de la escena política.
El ahora presidente en funciones ha firmado este domingo un decreto para convocar nuevas elecciones para el próximo 6 de septiembre. La Unión Europea, por su parte, ha manifestado su disposición a trabajar con el “gobierno de coalición” elegido el sábado por el Parlamento de Moldavia a pesar de la decisión del Tribunal Constitucional de considerar disuelta la cámara.