Las 18 instalaciones que conformaron la edición 2018 de la Fiesta de la Luz, en el centro histórico capitalino, recibieron más de 3,5 millones de visitas, casi el doble que la del año pasado. Una de las noches más concurridas fue el viernes 10 de agosto que reunió a 910 mil ciudadanos.
Quito invirtió USD 235 mil en obras y producción, además de otros USD 400 mil en infraestructura contratada con empresas locales. Cerca de 500 empleos directos se generan con este festival, organizado por la Secretaría de Cultura del Municipio de Quito. Según cálculos del cabildo, las cinco noches de la Fiesta, entre el miércoles 8 y el domingo 12, se registró también un amplio movimiento comercial que aspiraba superar los 15 millones de dólares.
Una de las obras más emblemáticas de esta edición fue la que se proyectó en la iglesia de San Francisco: ‘Herencia’, de los artistas Laurent Langlois y Daniel Knipper. El mapping no descuidó la popular leyenda de Cantuña y su pacto con el diablo. Otra peculiaridad de la Fiesta de la Luz que concluyó ayer fue la obra que se proyectó en el interior de la iglesia de La Compañía y por la que se formaron largas filas.
Después de tres ediciones, este masivo evento cultural se ha consagrado como un punto inamovible en la agenda quiteña. Una invitación a recorrer el centro histórico y apropiarse del espacio público.