El Presidente Lenín Moreno anunció que la sede de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), situada en la Mitad del Mundo, al norte de Quito, donde el país invirtió unos $45 millones, se convertirá en un centro de estudios superiores indígenas.
Moreno hizo el anuncio en un encuentro en el municipio de Latacunga, donde se firmó un decreto para la creación de la Secretaría de Educación Intercultural Bilingüe. En una reunión con la prensa extranjera, desarrollada el jueves 5 de mayo, el mandatario había dicho que el edificio de Unasur era un nuevo elefante blanco al que habría que buscarle otro destino.
“Tendremos el Centro de Educación Superior Indígena en el edificio de la Unasur. Haremos el trámite de su devolución, ya que no se ha cumplido ninguna tarea. Pasaremos a la Unasur a otro espacio”, dijo el Presidente.
“La Unasur lastimosamente no está funcionando por la falta de consenso de los países que la componen, (lo que) ha provocado la mitad de ellos la abandonen”, señaló el jueves el presidente ecuatoriano en referencia a Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú.
Esos países anunciaron en abril que abandonarían Unasur hasta que se garantice un funcionamiento adecuado de la organización, descabezada desde hace más de un año por discrepancias entres sus miembros.
Apawci Castro, portavoz de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), valoró positivamente el anuncio, así como el diálogo que ha emprendido el Gobierno con las nacionalidades indígenas, que espera se concrete en medidas específicas.
Moreno defendió el espíritu de integración que comporta el organismo multilateral, “una buena idea que lastimosamente, por fallas humanas, no se ha cristalizado, por fallas ideológicas”.