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El cartel del Golfo mata con explosivos a ocho policías, en Urabá, al noroeste de Colombia

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Al menos ocho policías colombianos han muerto este miércoles en una emboscada con explosivos en San Pedro de Urabá, en el departamento de Antioquia, en el noroeste, donde opera la mayor banda armada de narcotráfico de Colombia, el Clan del Golfo.

El ataque con explosivos contra dos patrullas de la Policía que se desplazaban en inmediaciones de la vereda El Tomate. Según fuentes de El Tiempo, el grupo de uniformados estaba acompañando a unos funcionarios del programa de sustitución de tierras y al paso de la caravana fueron activados los explosivos.

Durante el ataque “fueron neutralizados tres terroristas del Clan del Golfo”, manifestó el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas. “Esta clase de acciones lo que hacen es renovar nuestra decisión”, señaló.

El presidente Juan Manuel Santos rechazó el ataque, que calificó de “cobarde”, y expresó su solidaridad para las familias de los fallecidos, mientras el Ejército y la Policía han puesto en marcha una operación en zonas rurales y urbanas de San Pedro de Urabá en busca de los responsables.

El Clan del Golfo, que se hace llamar Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), nació tras la desmovilización de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en 2006 y se convirtió en la banda criminal más buscada del país, dedicada, sobre todo, al narcotráfico y la minería ilegal.

Las Fuerzas Armadas mantienen una intensa campaña contra el Clan del Golfo, y su máximo líder, Dairo Antonio Úsuga, alias ‘Otoniel’, es el hombre más buscado en Colombia, por el que Estados Unidos ofrece una recompensa de cinco millones de dólares. En operaciones militares han caído, entre otros, Roberto Vargas Gutiérrez, alias “Gavilán”, segundo al mando de la banda, así como su sucesor Luis Orlando Padierna, alias “Inglaterra”.

Luego de dos años de intensa cacería policial, el brazo armado de la organización ha pasado de 4.000 hombres a menos de 2.000, según las autoridades. Sin embargo, si se suman los miembros subcontratados, puede superar las 3.000 personas.

El pasado noviembre, Santos anunció en la zona bananera de Urabá el mayor decomiso de droga en una sola operación en la historia de Colombia: 12 toneladas de cocaína valoradas en 360 millones de dólares, un cargamento que pertenecía a Otoniel.

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