La Fiscalía General de Colombia ordenó la captura de 27 jefes del Eln, entre ellos cinco integrantes del denominado Comando Central (Coce) de esa guerrilla. Todos son acusados por la muerte de tres rebeldes desarmados de las FARC y el reclutamiento de menores.
Aunque esta decisión implica una nueva orden de captura contra Pablo Beltrán, jefe de esa guerrilla, esa orden está suspendida por pedido del gobierno de Juan Manuel Santos ya que está en Quito, en medio de las negociaciones de paz que fueron congeladas después de los atentados en Barranquilla, reseña El Tiempo de Bogotá.
Los tres miembros de la exguerrilla colombiana, hoy desarmada y convertida en partido político, habían sido retenidos en Santacruz de Guachavez, en el conflictivo departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, y sus restos fueron exhumados el 5 de febrero, señaló el ente investigador en un comunicado.
Las evidencias “dan cuenta que el ELN sería la organización responsable de la desaparición y muerte de los tres desmovilizados” y esa responsabilidad “se extiende por nivel jerárquico a los máximos cabecillas”, indicó.
Entre los armados reclamados por la justicia están Nicolás Rodríguez, “Gabino”, y Pablo Beltrán, jefe negociador de la guerrilla en Quito, sede del suspendido proceso de paz con la agrupación armada. Las medidas contra el ELN también incluyen a Antonio García, Ramiro Vargas y Gustavo Aníbal Giraldo, “Pablito”.
Los miembros del Coce también son requeridos por el reclutamiento forzado de 45 niños y adolescentes de comunidades indígenas en el selvático departamento de Chocó (noroeste), el más pobre del país, agregó el organismo.
Las Fuerzas Armadas de Colombia han asegurado que los líderes del ELN se encuentran refugiados del otro lado de la frontera con Venezuela, salvo Beltrán, quien permanece en la capital ecuatoriana a la espera de que se defina el futuro de las negociaciones.
El presidente Juan Manuel Santos congeló los diálogos de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) hace dos semanas, a raíz de una serie de atentados del grupo guevarista contra estaciones de policía.
Santos, quien dejará el poder en agosto tras dos mandatos de cuatro años, busca con el ELN un pacto similar al que selló con las FARC a finales de 2016 para extinguir el último conflicto armado de América.
El enfrentamiento recrudeció desde el 9 de enero, tras el fin de una tregua bilateral de 101 días.