El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ‘no será bienvenido’ para Cumbre de las Américas, según el anuncio hecho por la canciller de ese país, Cayetana Aljovín, tras la reunión del Grupo de Lima. Eso luego de que el Gobierno venezolano había dicho que estaría en la Cumbre defendiendo su soberanía.
Aljovín hizo el anuncio a la salida de una reunión del Grupo de Lima en la capital peruana, en la que cancilleres y representantes de doce países americanos debatieron medidas a tomar tras la convocatoria de elecciones presidenciales anticipadas en Venezuela para el 22 de abril.
Aljovín indicó que el Gobierno del Perú ha adoptado una postura sobre la presencia de Nicolás Maduro con el respaldo del Grupo de Lima y conforme a la declaración de Quebec, “que sostiene que cualquier alteración o ruptura del orden democrático de un Estado constituye un obstáculo para su participación en la Cumbre de las Américas”.
“Sobre esta base, y dada la actual situación en Venezuela, el Perú ha decidido expresar con respecto a la invitación al presidente Nicolás Maduro a la VIII Cumbre de las Américas, que su presencia ya no será bienvenida en dicho encuentro”, dijo.
Aljovín presentó una nueva declaración del grupo, suscrito por los cancilleres y representantes de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía. El documento rechazó la decisión que imposibilita una realización de elecciones presidenciales “democráticas, transparentes y creíbles” en Venezuela, pues no se asegura la participación de todos los actores políticos ni los estándares internacionales.
“Unas elecciones que no cumplen con estas condiciones carecen de toda legitimidad y credibilidad. Exhortamos al gobierno de Venezuela a que reconsidere la convocatoria de las elecciones presidenciales y que presente un nuevo calendario electoral”, sostuvo el Grupo de Lima.
Lo que se está viendo en Venezuela es un alarmante “desprecio por el Estado de Derecho y los valores constitucionales” que vienen en franco deterioro desde hace años pero cuya situación se agudizó durante el 2017. Esa es una de las conclusiones centrales de un duro informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y en el que fustiga al gobierno de Nicolás Maduro y al poder judicial por acabar con la separación de poderes y vulnerar los derechos humanos de todos los habitantes.
El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, anunció el pasado 6 de febrero que Maduro “asistirá puntualmente (a la Cumbre de las Américas) para defender la soberanía” de “América Latina y Caribeña, y para reunirse con el combativo pueblo del Perú”.
La VIII Cumbre de las Américas tiene como tema central la corrupción, si bien la tensión creciente respecto a la situación en Venezuela y el rechazo que la figura de Maduro genera en gran parte de los países de la región, ha hecho de la visita del presidente a Lima uno de los aspectos más destacados de la misma.
En Perú, políticos de todos los sectores apoyaron en el Parlamento un pedido para que se rechazara la entrada del presidente venezolano al país y se le declarara “persona non grata”.