Con la ausencia de Gareth Bale por Isco, en el Real Madrid y la presencia Giovani Lo Celso, por Lass Diarram en el PSG, el Real Madrid se hizo con la vitoria en el Santiago Bernabéu (3-1) gracias a una segunda parte en la que el equipo blanco tomó vuelo gracias a la entrada de Asensio y Lucas Vázquez.
Asensio y Vásquez abrieron el campo y terminaron con la resistencia del conjunto francés. El cambio en el esquema táctico, que pasó del clásico 4-3-3 de inicio con Isco en lugar de Bale, a un 4-4-2 sin Casemiro y con Kroos y Modric en el eje, resolvió una partido de ajedrez que durante gran parte de la contienda pareció tener resuelta el PSG.
Los franceses se adelantaron por medio de Rabiot, que cazó un balón suelto dentro del área y superó a Navas con un derechazo. Neymar sostenía el peso del ataque francés, aunque no llegaba a terminar con peligro las jugadas que encabezaba.
El Real Madrid se defendía como podía, superado en los espacios por las carreras de Mbappé, siempre peligroso, y porque no podía contener la salida por banda. Yuri, que completó un gran partido, apenas encontraba oposición y llegó a generar varias ocasiones de peligro por el flanco izquierdo.
El equipo blanco cuando Lo Celso derribó a Kroos dentro del área al filo del descanso y Cristiano convirtió el lanzamiento, reseñó El País. Sin embargo, todo cambió en la segunda parte con el ajuste táctico de Zidane. Las internadas de Asensio desarbolaron al PSG y surtieron efecto. Cristiano de nuevo, con el muslo, y Marcelo, tras una gran jugada, establecieron el 3-1 definitivo que sitúa al Madrid con un pie en los cuartos de final de la Liga de Campeones.