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Carta abierta al señor rector de la Universidad de Ginebra, Yves Flückiger

Tiempo de lectura: 4 minutos

Estimado señor rector:

La institución que usted preside albergó una conferencia del ex-presidente de Ecuador Rafael Vicente Correa Delgado el pasado lunes 6 de noviembre. Conferencia sobre la que usted emitió el siguiente tweet:

“El Ecuador como laboratorio de políticas sociales que concilian el crecimiento y la reducción de las desigualdades y de la pobreza #Unige” acompañado de dos fotos de Rafael Correa conferenciando en su universidad.

Al respecto quiero manifestar mi indignación, tanto por la invitación a Rafael Correa como por su comentario al respecto.

En primer lugar pues no es cierto que el “laboratorio” de Ecuador haya sido modelo de nada. Para empezar por algo que a usted le debería concernir personalmente, la administración de Correa fue especialmente hostil a la independencia universitaria (conozca los casos de la Universidad Andina Simón Bolívar y de la FLACSO en Ecuador, por ejemplo). Además, usted reside en Ginebra, lo tiene especialmente fácil para conocer los informes de derechos humanos en Ecuador que se realizan precisamente en la sede de las Naciones Unidas en Ginebra, y donde usted pudo haber escuchado a los activistas de derechos humanos denunciar los atropellos del gobierno de Rafael Correa a la libertad de expresión, los atropellos a la independencia judicial, a los derechos LGTBI, a las comunidades indígenas, a los emigrantes, etc…

Creo que también debería ser de su interés conocer el estado de putrefacción que dejó la corrupción del gobierno de Correa, comenzando porque su vicepresidente está en prisión en estos momentos imputado por asociación ilícita, y porque el ex fiscal general y controlador están acusados de corrupción, o que hay hasta 7 ministros investigados. Esto es un Estado de corrupción generalizada producida bajo el gobierno de Correa. Me pregunto si de eso también habrá hablado en la conferencia o le habrán informado. Situación de la que Correa hasta ahora se ha limitado a defender a sus ex-ministros sin reconocer responsabilidad alguna.

Si se quiere resaltar el plano económico quizá le interesará saber, a usted como experto en políticas laborales, que tras diez años de ingresos petroleros en máximos históricos el porcentaje de empleo formal en Ecuador no ha mejorado ni un poco, y sigue habiendo una tasa del 40% de empleo informal en el país. O quizá le interese saber que una vez bajó el precio del petróleo la pobreza volvió a subir en Ecuador en el año 2015 y 2016, por primera vez tras una caída sostenida desde la dolarización en el año 2000.

Es bastante ofensivo para los ecuatorianos que usted avale con su prestigio y su comentario los “experimentos de Correa” y que su supuesta imparcialidad científica ni siquiera le lleve a ver los “costes” de ese “experimento”.

Por todo ello, estimado señor Rector, no parece que sea “modelo” de nada las políticas de Rafael Vicente, y mucho menos que el Ecuador sea un “laboratorio de políticas sociales” lo que sitúa a los ecuatorianos como “cobayas” de los experimentos de cualquier “ingeniero social” que llegue a la presidencia, con economistas como usted “analizando” los resultados desde sus cómodas posiciones en universidades occidentales, cuan entomólogos viendo la evolución de distintas colmenas.

Es bastante ofensivo para los ecuatorianos que usted avale con su prestigio y su comentario los “experimentos de Correa” y que su supuesta imparcialidad científica ni siquiera le lleve a ver los “costes” de ese “experimento”. Que van desde los atropellos a los derechos humanos, hasta la pérdida de institucionalidad dramáticas que ha vivido Ecuador.

Ni Ecuador es un “laboratorio” ni los ecuatorianos somos “cobayas” ni los “economistas del desarrollo” del resto del mundo pueden situarse en esa inmoral posición “académica” de “analizar” los distintos “experimentos” llevados a cabo por los gobernantes de los países en vías de desarrollo -muchos de ellos de dudosas o nulas credenciales democráticas- como si no hubiese habitantes que sufren los “errores” de los “experimentos” en ellas. A este respecto le recomiendo encarecidamente que lea The Tyranny of experts de William Easterly. Ahí verá como su comentario se enmarca en una larga tradición de economistas del desarrollo con una muy cuestionable deontología económica.

Todo experimento socialista termina en miseria y destrucción. Y el “experimento” de Rafael Correa fue eso: otro experimento socialista más en la humanidad. Y como todos ha terminado igual: en empobrecimiento y destrucción de la producción y de la institucionalidad.

Hoy mismo se cumplen cien años del aniversario de la Revolución soviética, ese “gran experimento” que causó más de cien millones de muertos, avalado por gran parte de los economistas de aquel tiempo. Lo dramático es que economistas como usted no hayan aprendido la lección fundamental: todo experimento socialista termina en miseria y destrucción. Y el “experimento” de Rafael Correa fue eso: otro experimento socialista más en la humanidad. Y como todos ha terminado igual: en empobrecimiento y destrucción de la producción y de la institucionalidad.

Por todo ello, señor rector, le exigimos una disculpa hacia los ecuatorianos por su calificación hacia nosotros como sujetos de los experimentos de Rafael Correa, y por avalar con su tweet y su presencia en la conferencia de Correa sus tesis. Somos partidarios de la libertad y de la libre expresión, y más en la academia, pero creemos que en justicia se debería invitar a otro conferenciante en análogas circunstancias a las que ha sido invitado Correa a su universidad para ofrecer al menos otro punto de vista más allá del auto-elogio desvergonzado y alejado de la realidad al que acostumbra el ex-presidente expatriado.

Atentamente,

Quedo a su entera disposición:

Luis Espinosa Goded
Profesor de economía
Universidad San Francisco de Quito

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