El Presidente Lenín Moreno hizo la mañana del miércoles un duro cuestionamiento al agresivo endeudamiento realizado por su antecesor, el expresidente Rafael Correa, sobre todo en la última parte de su mandato. Solo para esas obligaciones, el gobierno debe destinar ahora unos $10.000 millones al año que suman el presupuesto de Salud y Educación. Moreno puso en duda las intenciones de ese endeudamiento.
“El presidente anterior se endeudó agresivamente en el último momento para dejar la sensación de haber dejado una obra monumental. Este momento estoy dudando muy seriamente de que me dejó la cosa así (el exmandatario Rafael Correa), precisamente para que yo fracase y poder constituirse en el principal opositor del Gobierno”, dijo.
El Presidente se reunió en Carondelet con representantes de los medios de comunicación ara hablar sobre la coyuntura política y económica. La anunciada no será la última consulta, dijo, y es el mandatario el que debe devolver al pueblo la potestad para que decida.
Moreno dijo que una de sus prioridades será recuperar el dinero que se llevaron por la corrupción y para eso están contactando con empresas internacionales que tienen la capacidad y la experiencia para rastrear el dinero y recuperarlo. “Lo vamos a hacer, porque al final son recursos que pertenecen al pueblo ecuatoriano, pero sobre todo pertenecen a los más pobres”, dijo.
La excesiva discrecionalidad, la perpetuación en el poder y las “horas extras” son dañinas, porque son los que dan paso a la corrupción, como es el caso de “esos ministros que trabajan en el día con las empresas… y en las noches” con las coimas, aseguró.