El mindfulness (el proceso psicológico de concentrarse en las emociones y sensaciones del presente) también puede vivirse con la música. De eso está convencida Cynthia Zak, periodista, escritora y educadora argentina que desde hace 30 años aplica el sistema en colegios, comunidades vulnerables de su país, Latinoamérica, Estados Unidos y en centros educativos independientes con el fin de que todos los participantes encuentren paz interior.
Según el diario El Tiempo de Colombia, el concepto ‘yoga music’ es un sistema educativo que incorpora muchas disciplinas como la educación emocional, la música y percusión corporal; no se trata de solamente yoga para formar personas pacíficas, compasivas, amorosas y respetuosas.
Este nuevo estilo de vida basado en la música como un método para buscar la paz y la tranquilidad funciona como una columna vertebral para acceder a una atención plena de una manera natural. Además, es un mundo que atraviesa la vida de todos: rompe barreras entre edades y necesidades.
En Spotify hay un sistema que ya tiene sus propias canciones para que los niños vivan su propia experiencia de mindfulness en cualquier lugar. Una parte del ejercicio de fijarse en el presente que con la música puede lograrse. Según el sistema de Yomu, eso se consigue a través de la percusión corporal, técnica que busca producir sonidos a partir del golpeteo sobre el cuerpo propio y otros objetos. En este caso, al ritmo de una canción.