El Ecuador sigue sacudiéndose política y económicamente. En los últimos meses las acciones tomadas por el presidente Lenin Moreno han sido efectivas en términos de imagen para el país. ¿Serán estas decisiones positivas o negativas para atraer la inversión extranjera al Ecuador? La inversión extranjera vendrá al país cuando existan organismos de control que no estén controlados o gerenciados por el gobierno central.
La propuesta del presidente Moreno de renovar todas las estructuras generará tranquilidad entre los inversionistas que buscan reglas claras y confianza. Para ello se deben renovar las instituciones y respetar el aspecto jurídico, constitucional y legal para que vengan más empresas.
Mientras esto sucede el gobierno de Lenin Moreno empieza a dar señales positivas. Su lucha contra la corrupción en casos sonados como el de la empresa brasileña Odebrecht y lo que sería una posible consulta popular para renovar el sistema de autoridades en las instituciones del país ha tenido un nivel de aceptación alta entre los ecuatorianos. Pero, para que esto suceda se necesitan unos meses.
En el caso de una potencial inversión extranjera hacia el país, los inversionistas querrán pisar seguro y esperarán que suceda la consulta popular para que todo se normalice y vuelva a su cauce normal. Ya que la corrupción afectó mucho a que no venga la inversión extranjera en los flujos que se requiere durante el gobierno anterior.
La inversión extrajera no superó los 800 millones de dólares, concentrándose el 90% en el sector de hidrocarburos, y demás sectores estratégicos donde justamente se ha destapado los casos de corrupción más sonados. Es eso lo que afecta esa percepción o imagen del país. Sin reglas claras, no vendrá la inversión extranjera en los niveles que se necesitan.
Los inversionistas quieren un país seguro y apegado a derecho con autoridades probas. Señales que considero son positivas para mejorar la imagen negativa que pudo tener el Ecuador durante 10 años y, sobre todo, deben estar acompañadas de otras acciones económicas.
El gobierno nacional va por buen camino para generar inversión, se ven acciones como el inicio de las obras en el puerto de Aguas Profundas de Posorja y los movimientos del ministro Pablo Campana para renovar el sistema arancelario con Estados Unidos y buscar inversiones en país. Esas señales son un espaldarazo a la inversión.
El nivel de aprobación que tiene el actual Presidente muestra otra imagen del Ecuador. De seguir con la consulta popular, ciertamente se habrán dado pasos concretos para abrir el país a nuevas inversiones.