El huracán Irma tocó tierra en islas del Caribe con efectos “catastróficos”. Primero tocó Barbuda, arrancando techos, inundando el litoral y cortando las comunicaciones. Luego pasó por St. Martin y St. Barth. Y ahora sigue hacia Puerto Rico. Hay dos nuevas tormentas formándose. Florida espera que Irma llegue con más fuerza que el devastador huracán Andrew en 1992.
El huracán Irma, el mayor jamás registrado en el océano Atlántico, con categoría máxima (5), una longitud de unos 200 kilómetros y vientos sostenidos de 297 kilómetros hora, llegó a las islas orientales del Caribe con toda la región, desde Puerto Rico hasta Florida, en alerta roja.
El ojo del potente huracán atravesó el miércoles las islas antillanas de San Bartolomé y San Martín, tras pasar por Barbuda, en su camino hacia Puerto Rico, República Dominicana, Haití y Cuba, antes de posiblemente dirigirse a Florida el fin de semana, indicó el servicio de meteorología francés Météo France.
El ojo del ciclón, de unos 50 km de diámetro, permaneció 01:30 en San Bartolomé y alcanzó luego San Martin, un poco más al noroeste. “Se están dando en estos momentos impactos importantes en estas islas” caribeñas, subrayó Météo France. El mar “está golpeando con una extrema violencia” en las costas y hay una “gran sumersión de las zonas bajas del litoral”, agregó.
El gobernador de Florida, Rick Scott, dijo que deben prepararse para una tormenta “con potencial para devastar nuestro estado”. Scott recalcó que Irma “es más grande, más fuerte y más rápido que Andrew” en referencia al huracán de 1992, el más dañino en la historia reciente de la península de Florida.
Aguaceros y fuertes vientos castigaron también a la vecina isla de Antigua, levantando escombros por los aires mientras la gente se resguardaba en casa o en refugios del gobierno. Las autoridades advirtieron a la gente que se resguardara del “violento ataque” de Irma, en un comunicado que concluía con la frase “Que Dios nos proteja”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró el estado de emergencia en Florida, Puerto Rico y las Islas Vírgenes estadounidenses, y las autoridades de Bahamas dijeron que evacuarían seis islas meridionales.
Las proyecciones del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos indican que Irma pasará este miércoles por el norte de Puerto Rico –sin impactar contra esta isla de lleno pero afectándola lateralmente–. El jueves podría afectar indirectamente a República Dominicana y a Haití y el viernes a Cuba. Todo apunta a que el fin de semana el demesurado huracán llegará a Florida. El ciclón avanza a 22 kilómetros por hora, su longitud es de unos 200 kilómetros y el radio de impacto de sus rachas de aire desde el núcleo de la tomenta, 75 kilómetros.
Irma se cierne sobre el Caribe días después del paso del huracán Harvey por Texas, que dejó al menos 60 muertos y daños materiales en torno a los $200.000 millones con inundaciones de un calibre nunca visto en la zona.
Las predicciones indican que el huracán irá recorriendo el Caribe en dirección noroeste y que el viernes pasará entre Bahamas y Cuba. El rumbo que tome a partir de ahí es todavía impreciso, aunque los modelos predictivos muestran ya una clara tendencia a que entre a Estados Unidos por el sur de Florida, barriendo los turísticos cayos y la zona metropolitana de Miami.
Los meteorólogos recalcan que los modelos de predicción del rumbo de los huracanes dejan de ser precisos más allá de las 72 horas de proyección. El margen de error de la predicción a cuatro o cinco días vista es de 280 a 360 kilómetros.
El estado de Florida ha declarado desde el lunes el estado de emergencia en sus 67 condados y su gobierno trabaja codo con codo con el Gobierno federal. La península es la prioridad nacional ante la llegada de Irma. La Guardia Nacional está lista para desplegar 30.000 rescatistas, 4.000 camiones especiales y 100 helicópteros para auxiliar a la población de Florida.