La situación de la Refinería de Esmeraldas es crítica, según el ministro de Hidrocarburos, Carlos Pérez García, en una entrevista publicada este lunes por el diario público El Telégrafo.
A más del costo de paralizar la recientemente repotenciada refinería, se corre el riesgo de un desabastecimiento de combustible. Para analizar las fallas y accidentes reportados, el Presidente Lenín Moreno irá este martes junto al ministro de Hidrocarburo.
Parar la Refinería tiene un costo de alrededor de $1,4 millones diarios, con el consecuente problema de causar un desabastecimiento de combustibles o, para evitarlo, tener que importar mayor cantidad de combustibles, lo que significa más salida de divisas, dijo Pérez García.
El ministro dijo estar consciente de que hubo sobreprecios en la repotenciación. Aseguró que el tema ya está en manos de la Contraloría y la Fiscalía. “Petroecuador ha hecho las denuncias respectivas y estamos analizando cada uno de los contratos. Y hablamos con las empresas para tratar de arreglar la situación”, dijo.
La refinería de Esmeraldas fue repotenciada hace pocos años. Contratos de los años 2012 a 2016 ascienden a un total de $2.134 millones utilizados para su rehabilitación; sin embargo, han existido algunas paralizaciones por problemas en áreas que fueron parte del proceso de repotenciación, como la Unidad de Craqueo Catalítico Fluidizado (FCC) y la parte de generación.
La semana pasada se paró debido a un incendio del generador, provocado por un sobrecalentamiento. García explicó que ese sistema de generación fue parte del proceso de repotenciación de la Refinería. “Si tenemos un accidente con la Unidad FCC es una paralización extendida”.
El funcionario dijo que nunca se implementó una planta paralela que tome los productos de la Refinería y los lleve a un nuevo proceso para la entrega naftas con estándares Euro 3 o Euro 5.