Icono del sitio Dialoguemos

La oposición de Venezuela se planta ante la Constituyente de Nicolás Maduro

Tiempo de lectura: 3 minutos

La oposición venezolana mantiene su pulso con el chavismo tras la convocatoria a Asamblea Constituyente “popular y comunal” a la medida de Nicolás Maduro, el aniquilamiento de la democracia, según Julio Borges, presidente de la Asamblea.

Borges llamó a rebelarse tras el giro inesperado del chavismo que amenaza con ahondar la crisis política, social y económica. “La lucha apenas comienza, seguiremos en la calle hasta lograr el cambio definitivo por el voto”, dijo el dirigente.

Maduro afirmó que el decreto en el que se convoca a la Asamblea Nacional Constituyente será publicado este miércoles y aseguró que quienes participarán en el proceso serán electos por “voto directo”.

El secretario general de la OEA, Luis Almagro, ha calificado la propuesta del régimen chavista como “un nuevo golpe de Estado promovido desde la presidencia del país”. En un video, Almagro ha insistido en que el Gobierno de Caracas continúa violando los principios democráticos básicos y le ha acusado de buscar consolidar su “régimen autoritario”.

“Retirarse de la OEA no le da carta blanca al régimen de Maduro para consolidarse como dictadura”, condenó Almagro, refiriéndose a la carta presentada por Venezuela el viernes pasado para abandonar la organización.

Horas antes, el lunes, Almagro había publicado otro vídeo lamentando las últimas semanas de caos en Venezuela pero evitando hacer referencia a la petición del régimen de una nueva Constitución.

“El continente pide que el país retorne a la democracia”, afirmó Almagro, apoyándose en la reciente decisión de una mayoría de países miembros de convocar una reunión de cancilleres para tratar la crisis que atraviesa el país bolivariano.

“Retirarse de la OEA no le da carta blanca al régimen de Maduro para consolidarse como dictadura”, condenó Almagro, refiriéndose a la carta presentada por Venezuela el viernes pasado para abandonar la organización.

La Asamblea Nacional comenzó ayer una reunión de urgencia para responder a la operación chavista. Y lo hizo mientras radicales intentaban asaltar el Palacio Legislativo y arrojaban objetos a quienes se encontraban dentro de él.

“No nos vamos a reunir con el Gobierno para avalar el golpe”, aclaró el gobernador Henrique Capriles, tras conocer la hoja de ruta planteada por el ministro Elías Jaua, cabecilla de la comisión presidencial.

“El Gobierno cree que los venezolanos somos estúpidos, pero se van a seguir dando con una pared. La Constituyente Comunal es un fraude y llamo al pueblo a desobedecerla”, dijo el líder opositor, inhabilitado por el gobierno el mes pasado.

Los opositores contaron con el respaldo internacional de los mayores críticos del chavismo. A la cabeza, Luis Almagro. “Es hora de que los derechos del pueblo sean restituidos, el continente pide que el país retorne a la democracia”, subrayó.

El gobierno de EEUU también reaccionó a la maniobra de Maduro. “Tenemos profunda preocupación sobre motivaciones para Constituyente, que ignora voluntad del pueblo y erosiona aún más la democracia”, acusó la administración estadounidense.

El chavismo se defendió insistiendo en que de esta forma le cierra el paso a una guerra civil, “con la apertura de un proceso popular y constitucional. Agotadas las posibilidades de diálogo no quedaba otra opción que convocar al diálogo constituyente”, se justificó Jaua.

Jaua lidera una comisión presidencial conformada con los colaboradores más estrechos del presidente, su núcleo duro, incluida su mujer, Cilia Flores.

En su mensaje urgente al país, Borges no olvidó, una vez más, a las Fuerzas Armadas, a las que volvió a exigir que abandone el silencio impuesto por la cúpula militar. El primero en responderle fue el general Vladimir Padrino López, ministro de Defensa y hombre clave para el chavismo.

“Todo el apoyo a esta propuesta popular, no puede haber un llamado más democrático que este… Un diálogo obligado porque estamos hablando de la construcción del Estado”, explicó el militar.

Salir de la versión móvil