La Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó este lunes 15 de mayo de 2017 una cita de cancilleres el 31 de mayo en Washington para evaluar la crisis política en Venezuela, donde la oposición exige en las calles la salida del presidente Nicolás Maduro. Tras postergar definir la fecha la semana pasada, una mayoría de 18 países fijó la reunión de ministros durante una sesión del Consejo Permanente, a la que Caracas nuevamente no asistió.
El único voto negativo fue el de Nicaragua, mientras que otros trece países se abstuvieron.
Esta iniciativa fue aprobada en la reunión del Consejo Permanente del pasado 26 de abril. La fecha del último día de mayo fue propuesta por la delegación de México.
En la votación 13 se abstuvieron y hubo dos ausencias. A favor votaron Guatemala, Guyana, Honduras, Jamaica, México, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Estados Unidos.
En contra votó Nicaragua. Ausentes se contaron Grenada y Venezuela.
Se abstuvieron Haití, República Dominicana, Saint Kitts and Nevis, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Suriname, Trinidad y Tobago, Antigua y Barbuda, Bolivia, Costa Rica, Dominica, Ecuador y El Salvador.
La delegación de Nicaragua expresó su desacuerdo sobre esta intención de reunión “ya que Venezuela no la ha convocado”, por lo que rechaza que se siga discutiendo sobre su situación sin su consentimiento. “Nicaragua considera inadmisible que un grupo de Estados miembros de esta organización insista en inmiscuirse en los asuntos internos de Venezuela (…). Ningún Estado o grupo de Estados tiene el derecho de inmiscuirse en los asuntos internos de un país”, leyó el embajador Denis Ronaldo Moncada Colindres.
El pasado 12 de mayo fue el primer encuentro para acordar este importante encuentro de cancilleres de la región, pero, al no encontrar acuerdo alguno sobre el particular, el consenso de todos decidió que este lunes fuese cuando se definiera el asunto.
Las dos fechas que se manejaban entonces eran 22 de mayo, incluida en la resolución presentada entonces por Canadá, y 29 del mismo mes a sugerencia de la delegación de Ecuador.
Tal como lo anunció desde el mismo momento cuando decidió comenzar el proceso de separación de la OEA, el pasado 26 de abril, la delegación de Venezuela no asistió a la cita de hoy.
Venezuela subrayó entonces que no participaría en ninguna actividad de la OEA y que no tendría en cuenta nada de lo que se apruebe en ese organismo. Sin embargo, la salida de este país tomará dos años para hacerse efectiva, en 2019, como marca la Carta de la OEA. Hasta entonces será miembro con plenos derechos y obligaciones y, por ende, el resto de países podrá seguir haciendo reuniones y pronunciándose sobre su crisis.
Esta es la primera vez que un Estado miembro de la OEA solicita su salida del organismo, lo que lo convierte en un hecho inédito.