Según las cifras oficiales presentadas por los medios oficiales, el desempleo en el país ha mostrado el descenso más importante de los últimos cinco años, ubicándose en el 4,4 por ciento en marzo de 2017 comparado con el 5,7 por ciento de marzo de 2016. Una caída de 1,3 puntos porcentuales, la cifra más alta en cinco años, con la diferencia de que el último año era un año electoral.
Según las cifras oficiales presentadas por los medios oficiales, ese 1,3 por ciento significa nada más y nada menos que 94 mil personas han salido del desempleo en un año electoral y con mucha expectativa sobre un giro en el modelo económico.
Según las cifras oficiales, el desempleo urbano fue el que más bajó al pasar de 7,4 por ciento al 5,6 por ciento en marzo de 2017, en un año electoral. Según las cifras oficiales, el desempleo rural bajó del 2,4 por ciento al dos por ciento. En el primero cayó 1,8 puntos porcentuales y en el segundo 0,4 puntos porcentuales.
Según las mismas cifras oficiales citadas por los medios oficiales, el subempleo pasó del 17,1 por ciento al 21,4 por ciento, una subida de 4,3 puntos porcentuales. Según las cifras oficiales, otro segmento que registró una caída es la del empleo adecuado que bajó del 40 por ciento al 38,5 por ciento; es decir, el 1,5 por ciento de la población económicamente activa dejó de tener un empleo adecuado en un año electoral.
Según la cifras oficiales, en marzo de 2016 existían 448.990 personas desempleadas y marzo de 2017 esa cifra bajó a 355.414. Y si en marzo de 2016 había 1’348.231 personas en el subempleo en marzo de 2017 ya había 1’726.030 subempleados; es decir, 377.779 personas más que no recibieron un salario básico ni trabajaron 40 horas a la semana, aunque tenían ese deseo y disponibilidad.
Todo esto en un año electoral con mucha inyección de recursos en determinados segmentos de la economía por la campaña y las expectativas de un cambio en el modelo económico.
Las cifras dicen mucho y no dicen nada, al igual que las matemáticas, las estadísticas y la Teoría de las Cuerdas, según The Big Bang Theory, la serie de Warner donde aparecen Sheldon Cooper, Penny, Leonard, Raj…, y Nimoy. Pero quien recorre la calle puede constatar cuál es la realidad del empleo en el país. Y esa realidad no puede ocultarse con titulares y auto-elogios.