El PSG ahora lamentarse de ese mano a mano que falló Di María con 3-1, pero empezó a perder la eliminatoria cuando dejó la ambición en casa. Y eso, ambición, es lo que le ha sobrado al Barcelona. Merecidísimo triunfo del equipo azulgrana, que ha conseguido levantarse de la hecatombe de París y sale reforzadísimo para el tramo final de temporada, reseñaba diario El Mundo.
Neymar hizo un trabajo impecable durante toda la noche. Se multiplicó por todo el césped, el PSG tendrá que revisar la cinta del partido por si había más de uno, y fue absolutamente determinante cuando más lo necesitaba el Barcelona. Forzó el penalti del tercero, marcó el cuarto y el quinto, y puso en las botas de Sergi Roberto el sexto.
“En París estábamos muy jodidos, pero este equipo podía. Si algo ha demostrado este equipo, es que está hecho para esto”, declaró Sergi Roberto en los micrófonos de BeIn Sports. Cuando entró en el césped, el Barcelona necesitaba tres goles y ha terminado siendo el héroe de la noche.
Barcelona se impuso 6-1 en el Camp Nou y se clasificó a los cuartos de final de la Liga de Campeones de Europa. Epico. Se puso 3-0 y acariciaba la hazaña, pero descontó Edinson Cavani y parecía sepultar la serie. En los últimos siete minutos, el local consiguió los tres goles que necesitaba para pasar al frente en la llave y desatar la locura de los catalanes.
Iban dos minutos nada más cuando Luis Suárez anticipó al arquero Kevin Trapp y puso el 1-0 en el Camp Nou para el local ante el PSG. Es que el equipo de Lionel Messi necesita una hazaña si quiere pasar a los cuartos de final de la Liga de campeones de Europa: debe remontar el 0-4 con el que los franceses se impusieron en la ida.
El partido se dio como era previsible: con el PSG tranquilo y preparado para contraatacar, mientras que Barcelona intentaba romper el cerrojo. Neymar bien abierto a la izquierda, Rafinha a la derecha; Messi suelto y Suárez en el área. Más Iniesta y Busquets en la distribución junto a Javier Mascherano que se sumaba a esa línea desde el lateral.
Le costó al local generar peligro (PSG defendía con los once sobre el borde del área grande. Pero logró lastimar con un par de remates desde afuera del área (Neymar, Messi de tiro libre e Iniesta). Y sufrió cuando Draxler desbordó por izquierda, Mascherano barrió y la pelota le pegó en la mano. También con un disparo de Lucas que controló Ter Stegen.
Sobre el final del primer tiempo, PSG salió y dejó algunos espacios. Luis Suárez a los 35, ingresó al área con la pelota dominada, pero su remate fue sencillo para Trapp. Cuanto más corría el reloj, más lejos estaba el Barca de conseguir la hazaña. Pero a los 40, cuando el primer tiempo se extinguía, Iniesta generó espacio y pasó; Neymar lo habilitó y el volante madrugó a Marquinhos, metió un taco imposible y Kurzawa marcó el 2-0 contra su propia valla. Barcelona volvía a creer y PSG empezaba a preocuparse.