Era el último reducto rebelde. El régimen sirio entró en la ciudad devastada por la guerra, Aleppo, el 27 de noviembre. Solo en dos semanas ha retomado el control de la mayor parte de ella con el apoyo de Rusia. Lina Shamy, una activista en el este de Aleppo, dijo en un video que Bachar al Asad y los iraníes rompieron el cese al fuego. “El genocidio sigue en curso”. Esas fueron sus palabras, tras asegurar que los civiles están atrapados.
Bana, la pequeña de siete años conocida internacionalmente por detallar en su cuenta de Twitter cómo es la vida en la sitiada Aleppo, desde la voz de su madre, ha escrito: “Le hablo al mundo en vivo desde el este de Aleppo. Este puede ser mi último momento para vivir o morir”. Y Fatemah, la mamá de Bana, ha escrito: “Querido mundo, aquí está ocurriendo un bombardeo en este momento. ¿Por qué guardan silencio? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? El miedo nos está matando a mí y a mis hijos”.