La Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, ha puesto sobre el tapete un tema preocupante: “Cuatro de cada diez jóvenes latinoamericanos no estudian ni trabajan (jóvenes denominados “Ninis”), o trabajan en el sector informal, lo cual reduce sus perspectivas de desarrollo y las expectativas de crecimiento a mediano y largo plazo”.
De ahí que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) han convocado a invertir en la juventud a través de una mejora de la calidad educativa, de las competencias de los jóvenes y de sus oportunidades de emprendimiento, con miras a reactivar el crecimiento económico.
Según la Cepal, América Latina es una de las regiones más jóvenes del planeta. Una cuarta parte de sus habitantes (163 millones de personas) tienen entre 15 y 29 años, pero casi 30 millones no tienen empleo, no estudian, ni reciben capacitación.
Según Bárcena, cerca del 70% de los jóvenes latinoamericanos no tienen capacidades técnicas, profesionales y de gestión avanzadas; el 21% no estudia ni trabaja ni está en capacitación; y el 19% cuenta con empleos de menor calidad en el sector informal.
La Cepal ha destacado que un 26% de los jóvenes de la región deciden emprender por necesidad, al no tener mejores opciones de trabajo. Así mismo, las barreras al emprendimiento son un 59% más elevadas en la región que en los países de la Ocde.
La integración de los jóvenes emprendedores de Latinoamérica en las cadenas globales de valor aún es limitada; “los emprendedores jóvenes enfrentan dificultades, incluso más que los adultos, para acceder a financiamiento, desarrollar capacidades gerenciales y participar de redes empresariales”.