La editorial Alfaguara preguntó a ocho ganadores de su premio de novela si existe América Latina, la región que la Feria Internacional del Libro de Guadalajara ha decidido homenajear tras 30 años de vida. “No existe ningún muro que pueda derrotar a nuestra lengua: el español”, dijo el nicaragüense Sergio Ramírez (Margarita está linda la mar, 1998).
Los escritores galardonados con el reconocimiento literario surgido en 1997, que premió por primera vez al cubano Eliseo Alberto, mostraron con orgullo su pertenencia a este territorio que vive y respira en los libros. La colombiana Laura Restrepo (Delirio, 2004) citó a algunos de sus ciudadanos ilustres: Pablo Neruda, Julio Cortázar o César Vallejo.
“Es en la novela latinoamericana donde nos hemos defendido de la desmemoria y de los poderes fácticos que quieren contarnos una historia mentirosa”. El colombiano Juan Gabriel Vásquez (El ruido de las cosas al caer, 2011) habló de la generación “que creó un continente con la palabra”. Ficciones como Terra nostra, Cien años de soledad y Pedro Páramo son ejemplos de la utopía literaria.
“América Latina existe, pero solo puede ser avistada desde el exterior o desde el exilio”, leyó Andrés Neuman (El viajero del siglo, 2009) en un texto que resaltó las contradicciones que forman parte de la identidad común. El peruano Santiago Roncagliolo (Abril rojo, 2006) ahondó en el exilio y cómo este creó valores compartidos. Sus padres abandonaron el Perú en 1977, dos años después de que se instalara un gobierno militar. Su destino fue México. “América Latina derribó sus muros en México”, afirmó el autor.
Roncagliolo recordó su infancia en el extinto Distrito Federal. Sus padres comenzaron a reunirse con otros peruanos. Los chilenos hicieron lo propio, al igual que los nicaragüenses y los argentinos. Poco a poco se dieron cuenta de que tenían proyectos e ideas en común: luchar por la libertad frente a regímenes militares y autoritarios.
“Esa idea de América Latina nació en México. Latinoamérica existe y somos todos los que existen al otro lado del muro de Trump”.
El argentino Eduardo Sacheri (La noche de la Usina, 2016), el más reciente Premio Alfaguara, resumió la historia de la región en un puñado de palabras: lengua, pobreza, unión contra Estados Unidos, el exilio, los titanes literarios y las contradicciones llenas de deseo y pérdida.
Xavier Velasco (Diablo guardián, 2003) cree que América Latina es la región que tiene a la urgencia como motor. Ese impulso vital llevó a Reinaldo Arenas a escribir tres veces Otra vez el mar hasta que la vio publicada en lugar de destruida. “Hay que sacar la novela, poesía y literatura necesaria que llevamos dentro para poder vivir”, dij0.