E Donald Trump trató de lavar su imagen golpeada tras las continuas apariciones de mujeres que le han acusado de acoso sexual. Lo hizo durante un acto en Green Bay, Wisonsin, cuando el candidato republicano a la presidencia estadounidense vio a una niña negra entre el público que llamó su atención y a la que llamó “guapa” en hasta siete ocasiones.
“¡Vaya! Felicidades, ¡qué gran trabajo! que guapa eres“, llegó a decir puntualizando que sus padres que hicieron un gran trabajo. Trump la invitó a subir al escenario cogiéndola en brazos y dejándola decir algunas palabras en el micrófono..
Todo se truncó en el último momento. Antes de dejarla ir, el republicano trató de besarle en hasta dos ocasiones a lo que la niña respondió retirando su cabeza bruscamente y poniendo cara de disgusto.
El magnate inmobiliario reunió a miles de personas en Wisconsin, estado en el que tiene pocas posibilidades de salir victorioso -los demócratas ganan ahí desde 1988- pero muy simbólico por el enfrentamiento que mantiene con el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Paul Ryan, oriundo de esa tierra.
Al grito de “Paul Ryan apesta”, centró su discurso en un presunto amaño electoral en el que insiste desde hace semanas sin presentar pruebas y del que el aparato republicano ya se ha desmarcado. (I)
Podcast: Reproducir en una nueva ventana | Descargar