Las críticas a Hillary Clinton desde el bando conservador han sido intensas durante, literalmente, décadas. Pero, recientemente, al calor de la presente contienda por la Casa Blanca entre Clinton y Donald Trump, varios importantes periódicos de línea conservadora que históricamente han dado su aval (endorsement) a candidatos republicanos y otros que nunca habían tomado una postura abierta en apoyo o en contra de un aspirante presidencial se han inclinado de modo singular hacia la demócrata y contra el magnate, señala Associated Press.
The Arizona Republic, por ejemplo, que desde 1890 nunca había dado su aval a un candidato presidencial demócrata, considera que Clinton tiene el temperamento y la experiencia para ocupar la Casa Blanca, mientras que Trump “no es un conservador y no está calificado”.
En Ohio, The Cincinnati Enquirer si bien recalca que Clinton y Trump son los candidatos presidenciales estadounidenses más impopulares a nivel histórico, decidió apoyar a la demócrata por considerar que ella tiene “una trayectoria de gobierno probada” mientras que el magnate es “un claro y presente peligro para nuestro país”. The Cincinnati Enquirer ha apoyado a los candidatos republicanos por casi un siglo, pero no en 2016.
Ambos periódicos son parte de la cadena Gannett, editora del USA Today, rotativo que justo acaba, también, de emitir no su aval sino su rechazo público a Trump, a quien calificó de errático, pobremente capacitado para ejercer de comandante en jefe, inmerso en el prejuicio, de palabrería incontinente y con una historia empresarial cargada de bancarrotas. El USA Today añadió que Trump es un mentiroso impenitente y, por ello, por primera vez en sus casi cuatro décadas de historia ha decidido emitir una expresión específica en torno a un candidato presidencial.
Y hay más periódicos que en el pasado han dado su aval a candidatos republicanos pero que en 2016 ha optado por apartarse de Trump y/o dar su espaldarazo a Clinton o a un tercer candidato.
The Dallas Morning News y The Houston Chronicle en Texas, estado proclive a los republicanos, dieron su aval a Mitt Romney en 2012 pero en 2016 se lo han otorgado a Clinton. El periódico Sun Sentinel de Florida (un estado crucial en esta elección), que avaló también a Romney en 2012, esta vez se inclinó por Clinton y dos importantes cabeceras, en estados que se inclinan por los demócratas, optaron por mantener su distancia: tanto The Detroit News, que apoyó a Romney en 2012, como The Chicago Tribune, que avaló entonces a Obama, han preferido en esta elección dar su aval a Gary Johnson, candidato del Partido Libertario.
¿Cuál es el efecto, con todo, de esos avales de periódicos en tiempos en que la circulación de esos medios impresos declina y mucha de la información que consumen los ciudadanos les llega por medios electrónicos y digitales, a veces por los canales informales de las redes sociales? (I)